Valió la pena el esfuerzo | Red Alumni UP

17/02/2024

Valió la pena el esfuerzo

Embajador del Fondo Becas "Líderes con Propósito para el Mundo"

Michael Mollo, el primero de su familia en ir a la universidad, recién graduado en Ingeniería Empresarial, superó retos y adversidades y está hoy en Austral Group.

Desde sus días en un remoto caserío en las alturas de Puno hasta su paso por las aulas de la Universidad del Pacífico y su actual trabajo en la pesquera Austral, la vida de Michael Mollo se ha caracterizado por enfrentar carencias y desventuras, pero también por demostrar un constante esfuerzo y un notable espíritu de superación.

Michael nació en la comunidad de Taipe, en el distrito de Ayapata, en Puno, cuyos pobladores se dedican generalmente a la crianza de ganado y a la agricultura de subsistencia, practicada en pequeñas parcelas, donde cultivan productos alimenticios tradicionales.

A los cinco años, su familia se mudó al distrito de Macusani (Carabaya, en la misma región). Su madre trabajaba como ama de casa y su padre, en la minería.

Por ocupar el primer puesto en el segundo año de secundaria en el Colegio Nacional José Macedo Mendoza, a los 13 años Michael pudo postular y obtener una beca para cursar los últimos tres años de la secundaria, del 2013 al 2015, en el Colegio Mayor Secundario Presidente del Perú (hoy COAR – Lima). Como se sabe, este Colegio es un internado que brinda educación de calidad a estudiantes sobresalientes que proceden de escuelas públicas de todas las regiones del Perú.

Mientras cursaba el quinto año, el Patronato BCP visitó su institución educativa ofreciendo 20 becas para estudiar en cuatro universidades del Perú, entre ellas, la Universidad del Pacífico. Michael ingresó. Sin embargo, los primeros años de adaptación fueron duros y en el 2018 tuvo que renunciar a la beca. Encontrándose en la dramática disyuntiva de que Michael dejara definitivamente la universidad o siguiera adelante sin la beca, sus padres tomaron la decisión de aportar sus ahorros. A su vez, la UP apoyó a Michael brindándole una subvención, y él continuó sus estudios con el firme propósito de esforzarse. Vivía entonces en casa de sus tíos y, para cubrir sus gastos, se dedicaba a impartir clases en una academia preuniversitaria. Mejoró su rendimiento y se sumó al equipo de tenis de mesa y al elenco de música de la universidad.

Redoblando esfuerzos y dedicación, le empezó a ir mejor, pero, en su afán por hacerlo todo al mismo tiempo y de la mejor manera, sacrificó las horas de reposo y descuidó su alimentación. Hasta que, en mayo del 2019, cayó enfermo y tuvo que dejar la universidad para recuperarse.

Cuando regresó a las aulas, lo hizo con mayor empeño y logró destacar. Al término de una exposición en el curso Arquitectura de Procesos de Suministro y Aplicaciones Tecnológicas, el profesor Nelson Cumpa, gratamente sorprendido con la disertación, le preguntó: “¿Ya estás practicando?, ¿no te gustaría hacerlo en Ajegroup?”. Nelson Cumpa, como Gerente de Operaciones y Distribución de esa empresa, le dio laoportunidad de demostrar su capacidad y de aprender de otros gerentes como Adolfo Bazo y Carlos Moya. Fue así como Michael realizó susprimeras prácticas preprofesionales en Ajegroup, la multinacional peruana de bebidas que tiene presencia en más de veinte países de Latinoamérica, Asia y África.

En diciembre de 2020, durante la pandemia de la COVID-19, Michael sufrió la pérdida de su padre. Sin embargo, al año siguiente encontró ungran apoyo fuera de su familia. A través del programa de becas del Patronato UP y la Universidad (hoy Fondo de Becas Líderes con Propósito para el Mundo), conoció a Gianfranco Castagnola, presidente ejecutivo de Apoyo Consultoría, quien terminó siendo su benefactor durante los dos últimos años de carrera y, hasta el día de hoy, sigue ejerciendo el papel de mentor.

Del área de Operaciones y Distribución de Ajegroup, Michael pasó a la de Estrategia y Mejora Continua, y hoy se desempeña en Auditoría Operativa de Austral Group, pesquera que es parte del grupo noruego Austevoll Seafood ASA, uno de los más grandes del mundo en su sector.

El año pasado, Michael fue uno de los muchos graduados que ya estaban instalados en el mercado laboral. Es el primero de su familia en haber pasado por la universidad y, cuando su madre ve lo que ha logrado, asegura, orgullosa: “Valió la pena el esfuerzo”.

Fuente: Revista Alumni UP N°36